En función de su precisión, las balanzas analíticas se presentan en diversas formas. A su vez, se separan en categorías basadas en el tipo de precisión fina y otra categoría para la precisión espacial, que suele referirse a cantidades de peso que pueden cuantificar con precisión.
Por otra parte, un aspecto más intrigante que añadir a una descripción son las muchas clases de balanzas analíticas según la tecnología que utilizan.
- Mecánica
Estas balanzas utilizan componentes mecánicos para funcionar y se distinguen por tener uno o dos platillos donde se coloca el objeto a pesar y pesas de contrapeso en el lado opuesto del aparato.
Aunque se consideran analíticas, estas balanzas no se utilizan en los laboratorios para investigaciones a pequeña escala, ya que no pueden cuantificar materiales ligeros.
Estas funcionan utilizando pesas pequeñas que ejercen una fuerza opuesta al material en el platillo, con el objetivo de calcular el peso del material en el platillo y mantener un equilibrio entre los pesos ejercidos por el material y las pesas pequeñas.
- Electrónica
Es la balanza que más se utiliza en los laboratorios, ya que puede medir con precisión el peso de objetos o sustancias de hasta 200 gramos y su potencial no supera con mucho su capacidad de lectura. Esencialmente, suplantaron a sus hermanas más tradicionales, puesto que pueden medir líquidos o sólidos de menos de 0,01 miligramos, sin ningún problema o variación en la verificación del peso.
Están compuestas por un sistema electromagnético y un electroimán que equilibran la fuerza que ejerce el objeto sobre el platillo. Debe calibrarse para obtener una lectura exacta de lo que se está pesando, ya que mide pesos muy ligeros.
Aunque el concepto original se basaba en el uso de pesas diminutas para determinar cuánto pesaban los materiales, con el paso del tiempo se desarrollaron nuevas tecnologías para mejorar y optimizar el instrumento. Por eso, cuando se habla de balanzas analíticas, se suele hablar de las electrónicas, porque son las que mejor se adaptan a las necesidades de un laboratorio.